viernes, 31 de octubre de 2014

♥DIOS ESTARÁ CONTIGO DONDE QUIERA QUE VAYAS♥


En el capítulo 1 del libro de Josué, Dios levanta a Josué como líder de Israel. En estos versos, Dios le da tres razones por las cuales levantarse.

En primer lugar, Dios le dice: Porque tú repartirás. Este es también el primer porqué de un empresario. Un empresario sabe que le toca repartir la herencia. Tenemos que repartir. Dios te va a dar a ti la capacidad de hacer que otros entren en la tierra prometida.

Por eso, tú tienes que levantarte. No se trata tan solo de pagar tu carro y pagar tu casa, sino que se trata de que, cuando tú prosperas, otros prosperan contigo; cuando tú te levantas, otros se levantan.

Ese es tu primer porqué: Porque hay gente que no entrará en la tierra prometida, hasta que tú entres.

En segundo lugar, Dios le dice: Porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. Imagina tener la garantía de que todo lo que emprendas tendrá un buen resultado. Por supuesto, esto no viene de la nada. Dios le requiere que nunca se aparte de su boca el libro de la ley, que medite en él día y noche, y que hiciese y guardase todo lo que en él está escrito.

Cuando te metes en la palabra del Señor, y permites que ella dirija tu camino, todo te sale bien.

En tercer lugar, Dios le dice a Josué: Porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. Ese es tu tercer porqué: Dios va contigo dondequiera que tú vayas.

Hay quienes se preguntan si Dios querrá que ellos vayan, o que ellos hagan, que se muevan; y Dios dice: Dondequiera que tú vayas. Dice el libro de Deuteronomio que somos bendecidos en nuestro entrar y en nuestro salir, en el campo y en la ciudad; así que, tú decides dónde quieres vivir, si en el campo o en la ciudad; y Dios te dice: Dondequiera que tú vayas.

Dios le dice a Josué: No pienses que te he abandonado. Los problemas nos hacen creer que Dios no está con nosotros, que Dios no está obrando en medio del asunto. Y, cuando ese sentimiento de abandono nos invade, nos paralizamos, dejamos de conquistar.

Quizás hoy estás en una gran incertidumbre, preguntándote: ¿Será esto de Dios? ¿Lo hago? Te invade el temor de cometer un error como el que te llevó a las circunstancias en las que te encuentras. Pero no tiene que ser como en el ayer. Dios quiere darte hoy un nuevo comienzo. Dios quiere que tú vayas a algún lugar, que te muevas; y él ha dicho: Mi presencia irá contigo, dondequiera que tú vayas.

Si Dios va contigo, vas a tener descanso, va a hacer provisión, va a haber protección; Dios te va a respaldar. En el pasado, te respaldaron los socios, te respaldaron tus amistades, pero, en esta ocasión, tu respaldo es el del Dios Todopoderoso, quien te dice: No temas ni desmayes; echa fuera el miedo de tu vida; echa fuera el desánimo y atrévete a moverte hacia lo que tengo para tu vida, porque yo voy contigo dondequiera que tú vayas.

Cuando vas con el respaldo de Dios, de lo poco, sale mucho. Cuatro leprosos, cuando caminaron en la palabra declarada por el profeta, se oyeron como un estrépito en el campamento enemigo, haciendo a un ejército completo salir huyendo de aquel lugar. Se atrevieron a caminar, y Dios respaldó cada uno de sus pasos.

De la misma manera, Dios va a respaldar cada paso que tú des, cada palabra que tú digas. Dios irá contigo, y el mundo entero tendrá que reaccionar a la presencia de Dios que va contigo.
♥CONFÍA♥

BY: MARIA JOSE SANTANA